El escenario no es un teatro ni un foro cultural; es la calle Isidro Huarte donde integrantes del gremio de teatro y artes escénicas han tomado las instalaciones de la Secretaría de Cultura para exigir algo tan básico como el pago por funciones que ya dieron a lo largo del año, algunos incluso desde el año pasado.
Cansados de escuchar una y otra explicación burocrática, actores, directores y técnicos llegaron desde las 6:00 horas de este miércoles para cerrar las puertas de la Secum hasta que se les transfiera su correspondiente pago. Sin embargo, lo único que encontraron fueron palabras, metáforas y amenazas por parte del secretario de Cultura, Marco Antonio Aguilar Cortés, quien intentó tender algunas trampas para que la manifestación se dispersara.
El abogado arribó a mediodía y explicó a los manifestantes que la secretaría a su cargo nunca ha tenido dinero para pagarles, que su función es ayudar a los artistas para que trabajen y obtengan un recurso que está en otra parte, en Finanzas, para ser precisos. Con ese estilo pausado que le caracteriza, Aguilar les reiteró que está con ellos, que los admira mucho, que los entiende y que los apoya “a pesar de cómo sean”.
En contraparte, los artistas querían soluciones y no más promesas ni explicaciones técnicas, a lo que el secretario contestó: “Ese lenguaje (el de manifestarse) no va a funcionar, no funciona así conmigo”. Después ofreció que una comitiva de tres personas pasara para revisar todos los expedientes y luego ir en conjunto a la Secretaría de Finanzas para ver dónde está el dinero: “Ellos son los que pagan, no nosotros. Me preguntarán quién contrató y efectivamente fuimos nosotros, pero el pago está allá. ¿Y saben qué?, no me arrepiento de haberlos contratado; aun a sabiendas de cómo son, los volvería a contratar”.
El tono de sus expresiones comenzó a irritar a los presentes, quienes además recibieron una petición por parte de Aguilar Cortés: permitir que funcionarios de Conaculta pudieran ingresar al edificio para llevarse pertenencias que habían dejado, pues estaban por viajar a la Ciudad de México. La propuesta no fue aceptada y entonces el secretario explotó:
“Bueno, pues entonces aquí se quedarán todo el mes”.
Acto seguido, los manifestantes expresaron a los integrantes de Conaculta que la toma era una medida extrema, por lo que esperaban su comprensión, pero que la amenaza de Cortés ahí quedaba registrada. “¿Cuál amenaza?”, preguntó el abogado; “que aquí nos quedaremos todo un mes, lo acaba de decir”, le respondieron; “Yo dije se me hace que ustedes quieren quedarse todo un mes”, y lo repitió tres veces en la grabadora de este reportero, “para que quede grabado lo que dije”.
Una vez más los artistas lo pusieron en contexto, le enumeraron cada una de las respuestas que han recibido por parte de distintos funcionarios de la Secum, donde se les asegura que todos los trámites están cumplidos, que es cuestión de días para que se depositen los pagos, pero que eso no ha sucedido con la mayoría de casos. “Lo que sé es lo que les digo, yo no soy un mentiroso porque los mentirosos se derrumban rápidamente”, atajó el ex rector de la Universidad Michoacana.
En un intento por resolver más rápido el problema, uno de los manifestantes sugirió que el secretario los acompañara personalmente a Finanzas para exigir los pagos atrasados, a lo que el funcionario accedió. “Nos vemos en la entrada por la avenida Ventura Puente, y en cuanto platiquemos con ellos, ustedes liberan estas instalaciones, como lo sugirió el compañero”. Solo que nadie había dicho eso, pero el abogado se quiso ver más hábil y marrullero.
Al final, no se llegó a ningún acuerdo y el funcionario se volvió a enojar: “Yo me voy, ahí me avisan cuando se pongan de acuerdo”.
Actualización
Finalmente, por la tarde del jueves 3 de septiembre la Secretaría de Administración y Finanzas depositó casi la totalidad de los adeudos a este gremio de artistas, pero aún existen otros pendientes a más creadores y gestores a quienes la Secum les ha solicitado lo mismo: tener paciencia.