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Cuatro poemas de La Señorita Masturbación

Depresión

El doctor dice que soy un caso normal

Le he dicho que cuando quiero estar sola tocan mi puerta

En el caos no existe la salida

Parece un sitio cómodo, pero el doctor levanta la ceja cuando se lo digo

Esta noche hay rock en la radio

Un viejo twist de Chuck Berry

No hay vodka, pero hay gin

Nunca se sabe qué va a ocurrir mañana

Salvo los lunes

Que son los peores días, más que los domingos

El lunes todo empieza de nuevo

Y hay que esperar al martes para salir debajo de las cobijas

Conectar el teléfono

Mirar el sol desde la ventana y pensar en el final de los tiempos

Que nunca llega pero que retumba debajo de mis paredes

Esta es la gran depresión de todos los tiempos

Hombres y mujeres sumidos en sus camas sin querer salir

Este es el mal de los tiempos

Han quedado atrás los genocidios escandalosos que ahora están disfrazados de tiempos mejores….

Y tú puedes verlo

En los ojos de esa mujer que está comprando unas botas nuevas

Y en los ojos de los niños que están meciendo sus últimas sonrisas en viejos columpios, soñando con gorriones que ya no existen

Puedes verlo en la cara de ese hombre reclinado en la barra

Y en la sonrisa idiota de aquel que va conduciendo un Cooper

No hay nada… detrás de la vida no hay nada

Sólo una envoltura de celofán rota que decía tu nombre

Estrellarme

Estrellarme entre fierros retorcidos en un cadillac rosa 68 oyendo a Morrisey, con una botella estrellada de vodka o gin al lado

Estrellarme en la obscuridad como último sueño

Estrellarme como Dean a toda velocidad

Estrellarme como Lady D escapando de un paparazzi

Estrellarme como una botella en la cabeza de un pendejo

Estrellarme en el cielo como un cohete

Estrellarme camino a la luna…contigo, por supuesto

Estrellarme en una avioneta como Valens y Buddy H

Estrellarme contra todo

Menos contra la puta realidad…

La gran pretendiente

Sí, soy la gran pretendiente

Cuando he soñado

No he podido esperar a terminar el sueño

He despertado demonios de odio que han acabado mis torpes esperanzas

Y en ello se me ha ido la escasa razón que ya no poseo

Sentada entre miles de libros que me miran mudos y eternos

Que no dicen nada porque guardan secretos en sus pastas

Sé que he de irme

Pronto o tarde, da lo mismo

Me iré pensando que jamás he robado corazones ajenos

Ni borrado sonrisas que no me pertenecen

Y que quizás de haberlo hecho

Todo hubiera sido más divertido

Un hombre no patea perros heridos

Eso es lo que se aprende de un viejo perro tirado y que no va a levantarse jamás

Un hombre no patea perros heridos

Una mujer sí, una a la que todo le parece insignificante

Esa que hace un gesto de desprecio ante cualquier cosa

Esa que hace sonar los tacones cuando está molesta

Esa que te dice que hubiera preferido casarse con: Jaimito

Esa…esa sí patea perros heridos

Y no sabe que les hace un favor

Un perro herido sabe lamer sus heridas

Buscar la obscuridad

Reconfortarse y olvidarse de las perras malnacidas

sritamasturbacion@gmail.com

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