Por Laura de Montanaro
Por allá de 1990 se estrenó una película basada en una novela de Stephen King, It, o Eso, en español, ¿Quién no recuerda a ese malvado payaso que vivía en el subsuelo, siendo las alcantarillas el medio perfecto para atacar?
Tuve la desafortunada oportunidad de verla a la tierna edad de 10 años, en casa de unos primos mayores cuya intención malvada era que yo y otras primas más pequeñas no pudieramos dormir esa noche, y su plan quedó bien, mi madre no pudo hacer que durmiera bien en un mes y mucho menos logró que me bañara durante una semana, mi terror era incomprensible, me atrevo a decir que una generación entera de chamacos que ahora tenemos entre los 25 y treinta años salimos seriamente traumados y estimulados por esta película, tanto que aún tengo un par de amigos que siguen tapando con el bote de basura la coladera de sus regaderas al bañarse, solo por si acaso.
Ahora que lo pienso bien, temerle a Eso es muy estúpido.