Franck Dubosc es muy conocido por su faceta de actor, sin embargo, es también un guionista con una larga trayectoria en cine y televisión. Ahora, hace su primera incursión en la silla de director con la comedia romántica Rodando hacia ti (Tout le monde debout, 2018). La obra, seleccionada para formar parte del 22 Tour de Cine Francés, ya tuvo su estreno en las salas de cine de su país en marzo del presente año, convirtiéndose de inmediato en uno de los mayores éxitos del género en lo que va del 2018.
La comedia se centra en Jocelyn, un hombre maduro, exitoso y con tipo de seductor, que busca cualquier oportunidad para hacer una conquista momentánea. No obstante, en un intento desesperado por seducir a una joven ingenua, Jocelyn finge ser parapléjico. La chica no se deja impresionar, pero en cambio le presenta a su hermana mayor, la vivaz Florence, violinista profesional y entusiasta jugadora de tenis, quien está confinada a una silla de ruedas debido a un terrible accidente automovilístico. Casi de inmediato, Jocelyn queda prendado de la vitalidad de Florence, pero es incapaz de solucionar el enredo que él mismo ha creado.
Parece claro que la cinta está construida, de principio a fin, para el lucimiento de Dubosc, quien hace de hombre orquesta: no solo dirige, sino que también escribe y protagoniza su ópera prima. El francés cuenta con una vasta filmografía en el género, por lo que no sorprende que sepa manejar con pericia los engranes que hacen funcionar las situaciones humorísticas.
La película juega con las reglas tradicionales de la comedia romántica. En ese sentido, es la típica película de chico-conoce-chica: los opuestos que se atraen, los cómicos enredos que dificultan la relación y la conclusión con final feliz. Pero afortunadamente es capaz de ofrecer algunos giros inesperados que la hacen más ágil y divertida. Algo que ya es mucho pedir en una cinta del género.
La conducta de Jocelyn como un seductor engreído que ve cada posible conquista como un nuevo desafío a realizar, es contenida solamente por el encanto de la vibrante Florence, en un clásico juego de contrastes. En este sentido, la condición de vida de la encantadora mujer funciona como una especie de revulsivo frente a la conducta misógina del personaje masculino.
El tono desenfadado de Franck Dubosc, quien se hace a sí mismo un gran favor al quitarse varios años de encima (en el filme se dice de 49 pero aparenta muchos más), hace juego con la energía y el encanto de la actriz Alexandra Lamy, quien evidentemente debió esforzarse en serio para dominar el uso de la silla de ruedas. Hay también un par de personajes que completan el cuadro: Max, el médico, amigo y confidente de Jocelyn, así como su joven e impresionable secretaria interpretada por la ojiverde Elsa Zylberstein.
Rodando hacia a ti es una comedia romántica bien armada y su solidez narrativa descansa en la fluida interacción entre sus protagonistas. Es simple, predecible y convencional, pero cumple adecuadamente con la dosis de humor y romance que se espera en un trabajo del género. Algo que la convierte en una opción perfectamente válida para una de estas agradables tardes de otoño.