El caso de la banda rusa punketona Pussy Riot sigue ocasionando protestas en Moscú, luego de que la Corte dictara sentencia condenatoria por dos años de prisión. Como recordarán, y si no saben aquí los actualizamos, las integrantes de esta agrupación están en la cárcel acusadas por vandalismo y odio religioso solo por grabar un video desmadroso al interior de una iglesia, y claro, por encarar en sus letras a Vladimir Putin, quien hace poco llegó una vez más a la presidencia de ese país.
Desde que comenzó el juicio, las expresiones de solidaridad con las rockeras han surgido tanto en Rusia como en otras partes del mundo; desde el ex Beatle Paul McCartney, la llamada reina del pop Madonna, el vocalista de Franz Ferdinand, Alex Kapranos, la islandesa Björk y hasta el mítico integrante de The Who, Pete Townshend.
Con el estribillo de “Madre mía, llévate a Putin”, las Pussy Riot hicieron enojar al más alto conservadurismo ruso y ahora pagan la osadía tras las rejas, un auténtico machetazo a la libertad de expresión en pleno siglo XXI.
Nadezhda Tolokonnikova, de 23 años; María Alyokhina, de 24; y Yekaterina Samutsevich, de 29, son las punketas que ahora deberán estar encerradas por 24 largos meses por hacer un video que las autoridades consideraron casi como un acto vandálico.
En la más reciente manifestación callejera para condenar la opresión del Estado-Iglesia apareció el aclamado ajedrecista Garry Kasparov, quien en plena trifulca fue maltratado por las fuerzas policiales y llevado a los separos para horas más tarde ser liberado. Sin embargo, la cosa podría no terminar en eso, ya que el genio de los tableros ha sido acusado de morder a un policía, lo que también lo podría llevar a juicio.
En dicha manifestación participaron simpatizantes y contrincantes de la banda, por lo que todo terminó con decenas de detenidos.