El panorama del rock hecho en México se torna más interesante cuando volteamos la mirada hacia la escena independiente y descentralizada, de lo contrario, caeremos en el indie descafeinado de los Zoé, Hello Seahorse y compañía. Un botón de muestra lo encontramos con el veracruzano Ramsés Ojeda, quien está por lanzar el disco Light Road, grabado en su propia casa: el Lamat Home Studio.
En estas páginas ya les habíamos platicado de su anterior producción titulada La sombra que nadie vio, del cual se desprendió una gira que ha quedado registrada en un DVD. Si bien es cierto que el trabajo de este guitarrista se había desarrollado en solitario, desde la ejecución instrumental hasta todo el proceso de producción, para el nuevo disco ha invitado a colegas con similar lenguaje musical, lo que le ha permitido que la placa no suene igual a los anteriores y al mismo tiempo no caer en lo artificial, por lo que sus amigos han dejado el corazón en las grabaciones y él se convirtió en una suerte de director orgánico.
“Puede decirse que el disco se grabó dos veces; una como siempre lo hago, de modo midi y grabando las guitarras físicas, y después con cada uno de los músicos invitados, entre los cuales estuvieron Víctor Méndez en la batería, Stalin Mazariegos en las percusiones, Yatzil Xaca en los teclados y strings, Jorge Rivadeneyra en el bajo, obviamente yo en las guitarras, algunos bajos, banjo y batería, y Marco Rentería, bajista de Jaguares, Klesmerzon y Lila Downs, en la colaboración de nuestro primer sencillo Photonauta”, nos cuenta Ramsés.
Agrega que Light Road no es el clásico disco de rock instrumental ruidoso y solos de guitarra interminables, “es muy movido, con tintes de funk en algunos temas como Hot Mood, In the Road y Dumpster, las baladas que no dejan de tener un sonido rockero como Photonauta, Closer y Sueño Àtmico, en este último haciendo una mezcla de rock con instrumentos como charangos, violines, percusiones, órgano Hammond y guitarras eléctricas, dándole al tema un sentido muy emotivo”.
También se incluyen los temas No More Wars! y T-40 Hours (inspirados en los transbordadores espaciales de la NASA) y 2 de Octubre, de clara referencia a 1968 y el cual contiene audio original de lo ocurrido en Tlatelolco.
Como todos los padres, Ojeda tiene ya a su hijo consentido: Atemporal, “un tema que considero la joya del disco, es más largo de todos pero musicalmente fue donde no me guardé nada, pues cada parte de él tiene un sentido muy especial y las personas que lo han escuchado mencionan que puede ser el mejor que he compuesto”.
Light Road verá la luz en febrero y se apunta como una gran propuesta en la esfera del independiente mexicano. Como prueba, te dejamos el primer sencillo y si deseas conocer más sobre este músico visita su página oficial.