Una de las escenas más llamativas de Ekki Mukk (Nick Abrahams, Inglaterra), cortometraje que compite en la emisión XVI del Festival Internacional de Cine de Guanajuato (GIFF, por sus siglas en inglés), evoca el cine de Peter Greenaway, en especial aquella secuencia en la que un hombre solitario se sienta a contemplar la descomposición de los cadáveres humanos.
Con soundtrack de la banda islandesa Sigur Ros, que por cierto cerrará este año el Corona Capital en la Ciudad de México, y una impecable fotografía, Ekki Mukk apunta a ser la ganadora en la categoría de Ficción Internacional del GIFF. Elementos oníricos y fabulosos, como un caracol que habla y le da pistas susurrantes al personaje principal sobre la búsqueda que ha emprendido, se entremezclan en la visión que éste tiene al llegar al bosque: “no debes temer, se valiente, mi pequeño, se valiente”, antes de que se encuentre con un coyote que, en apariencia, sólo en apariencia, constituye una amenaza para él.
Por momentos, la atmósfera parece guardar relación con la del cuento del escritor mexicano Arturo Souto, “Coyote 13”, donde un cazador acecha al último cánido salvaje de la región; asimismo, las palabras del compañero de viaje del personaje principal hablan de aquello que Jorge Luis Borges ha dicho sobre los sueños: el miedo es capaz de engendrar tigres ante nosotros y si en la realidad nos encontráramos de pronto ante un tigre, sin duda experimentaríamos una sensación de sobrecogimiento.
Otro de los cortos que suscitó la expectación del público fue Antes de perderlo de todo (Xavier Legrand, Francia), que narra detalladamente el drama al que una madre se ve expuesta al tratar de huir de una vida de violencia familiar, en la que sus hijos también están inmersos. Con un desarrollo impecable, esta realización tiene puntos de contacto con Mobile house (Vladimir De Fontanay, Estados Unidos), cortometraje sobre una madre soltera envuelta en una red de prostitución que, al darse cuenta del riesgo que corre su hijo, decide escapar del hombre que les mantiene sujetos; luego de conseguir resguardarse de la noche, madre e hijo se percatarán que con el alba es posible que la esperanza no sea sólo un espejismo. Una nueva metáfora del viaje inmóvil.
En este segundo programa de Ficción Internacional, 9 vacunas (Iair Said, Argentina) rompe el suspense de los otros trabajos y escenifica, mediante un relato estructurado día a día, las posibilidades amatorias que una mordida de perro y una mordida de gata (sí, sin albur) son capaces de desencadenar para un joven y una joven bonaerenses que se encuentran, se dejan de ver y se reencuentran en el hospital en el que les deben ser aplicadas nueve dosis de medicamento, a fin de no contraer rabia; una comedia con un final inesperado.Completan el cuadro Daimi (Marie Grahto Sorensen, Dinamarca) y el corto Más de dos horas (Ali Asgari, Irán), que el escritor y director colombiano Ciro Guerra, la directora Rania Attieh y el crítico de cine Matthew Takata deberán juzgar junto con el resto de los trabajos de ficción para declarar un ganador de la categoría en esta XVI emisión del GIFF en la que el cine colombiano, el realizador Darren Aronofsky y el director británico Danny Boyle son los invitados de honor.