Por Antonio H. Vargas
El olor es incunable, los muros están tapizados de libros y las vitrinas contienen ejemplares que si las manos profanas del humano los toca, en el instante se deshace. El sueño y la pesadilla de cualquier bibliófilo: vivir entre libros, entre historia, vivir en el pensamiento, vivir entre hogos, vivir en una biblioteca: la Biblioteca Pública de la Universidad Michoacana. Justo ahí se llevó acabo el concierto de Dúo Aliada en el marco del Festival de Música de Morelia.
De origen austriaco, Michal Knot y Bogdan Laketic recrean la música clásica con instrumentos poco comunes: un saxofón soprano y un acordeón que juntos dan un toque de frescura a su interpretación, proporcionando a quien los escucha un viaje inusitado. El Dúo Aliada se ha presentado en varias salas de concierto, entre las que destacan Musikverein Wien, Brucknerhaus Linz, Radiokulturhaus Vienna y Palais Niederösterreich, además de ser nominados en el HFP como Artista del Año.
Este par de jóvenes deleitaron al público que se dio cita en la Biblioteca con un programa muy variado, desde Bach hasta Piazzola, iniciando la velada con la pieza de Bach Partita no 1 en si bemol mayor que interpretó el acordeón solo, dando una probadita de barroco al público.
Continuaron con Edvard Grieg y su Suite Holberg, Op. 40, donde el acordeón lazaba notas desgarradoras y el saxofón lo seguía en melancolía. En la tercera pieza nuevamente el acordeón lazaba sus gritos solo, ya que interpretó al compositor danés Ole Schmidt con Toccata No. 1, una especie de tango y jazz que desborda pasión.
La cuarta pieza fue Seis Danzas Folklóricas Rumanas de Béla Bartók, inyectando alegría y ritmo a público. Finalmente cerraron con Historia del Tango, de Piazzola, donde el acordeón simulaba al plumaje de un pavo cuando éste lo extiende, mientras las notas del saxofón simulaban el murmullo de los libros. Al terminar de narrar cómo surge el tango y llevarnos por varias partes de la melancolía, el público ovacionó de forma merecida a los oriundos de Austria.