El actor Casey Affleck acudió al Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), para presentar su más reciente producción cinematográfica Manchester by the sea. El actor quien ha construido una sólida carrera en Hollywood con películas como el thriller Gone baby gone (2007), dirigido por su hermano Ben Affleck, así como el extraordinario drama histórico El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford (The assassination of Jesse James by the coward Robert Ford, 2007), dirigida por Andrew Dominik, que le valió una nominación al Oscar como mejor actor de reparto.
Affleck acudió de buen humor a la capital michoacana donde develó una butaca con su nombre, tuvo una breve charla con la prensa y aprovechó para practicar un poco su español, idioma que asegura dominaba hace tiempo cuando recorrió junto a su madre y hermano varias ciudades mexicanas. Casey Affleck es un gran actor que se toma con calma la elección de sus proyectos, para el año entrante dirigirá el filme Far bright star, sobre un soldado de caballería que incursiona en México para perseguir a Pancho Villa.
Manchester by the sea (2016) es el tercer largometraje que escribe y dirige el cineasta neoyorquino Kenneth Lonergan, que se especializa en elaborados dramas como Margaret (2011) y Puedes contar conmigo (You can count on me, 2000). La película se estrenó en el Festival de Sundance y retuvo por un corto tiempo el récord de mayor precio para adquisición de derechos de distribución cuando fue comprada por Amazon en diez millones de dólares, poco después The birth of a nation (2016), le arrebató la marca cuando fue adquirida por Fox Searchlight en más de diecisiete millones de billetes verdes. Hay que aclarar que la cinta comenzará su corrida comercial en Estados Unidos a mediados de noviembre de este año.
La historia se desarrolla en la población costera de Manchester-by-the-Sea en el estado de Massachusetts. En ese lugar Lee Chandler es designado para fungir como el tutor de un sobrino adolescente cuando su hermano muere de una manera repentina. Pero hay algo en el pasado de Chandler, un descuido inaceptable que lo hace cargar con la culpa, dolorosos recuerdos y el rechazo de buena parte de la población del lugar.
Lonergan retoma el tema de la crisis familiar como base del relato. A partir de una cuidadosa edición, alternando flashbacks, nos va dosificando la información que nos permite enlazar las dos tragedias que envuelven a la familia Chandler. La pequeña población costera influye directamente en el desarrollo de la historia: la pesca familiar en bote, el cementerio histórico en donde no pueden enterrar a nadie durante el invierno y las calles empinadas e irregulares, que propician uno de los encuentros más devastadores que se haya visto últimamente en la pantalla.
Casey Affleck (quien desde ahora se apunta entre los favoritos para las nominaciones al Oscar del año entrante), hace un extraordinario papel de un hombre atormentado por heridas que no cierran. Hosco y ensimismado bebedor compulsivo y buscapleitos de cantina. Para colmo debe enfrentar una especie de paternidad inesperada y la dolorosa presencia de su ex esposa. La ardua labor de enfrentar la pérdida de seres queridos es representada por el menor de los Affleck con fuerza y honestidad.
El más reciente trabajo de Lonergan es uno de esos raros dramas tan sólidos que es muy difícil encontrar algo que no funcione. La cinta es conmovedora y la tragedia de su protagonista es tan desgarradora que incluso sus ligeros destellos de humor parecen agridulces y rotos. Manchester by the sea es uno de esos trabajos redondos y perfectamente recomendables, no importa su desempeño final en taquilla, la cinta en sí misma es un gran e imperdible logro artístico.