En noviembre de 2022, la actriz Leticia Huijara, en su papel de presidenta de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas (AMACC), anunció que ante a las dificultades que atravesaba el organismo debía suspenderse la organización de la ceremonia de entrega del Ariel.
Muchas voces se alzaron en aquel momento, desde las que afirmaban que no se perdía gran cosa, hasta quienes reconocían la importancia de dicha entrega, entre ellos Guillermo del Toro, quien hasta se ofreció a solventar el costo de las estatuillas.
El anuncio desató una guerra de declaraciones. Por una parte, actores y directores de renombre evidenciaron la falta de apoyos a la industria como un sello de la actual administración, mientras que la secretaria de cultura federal, Alejandra Frausto, aseguró que el cine mexicano recibe más apoyos que en otros sexenios y que el número de películas producidas en 2022 alcanzó una cifra histórica.
Eso sí, afirmó que los apoyos ya no se dan a “organizaciones gremiales” ni a “quienes (antes) lo recibían todo”, reproduciendo el trillado discurso de los funcionarios obradoristas.
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Dos posturas aparentemente irreconciliables que nos dan una idea de lo que pasa con esta industria tan compleja. Entre aguas tan agitadas dos cosas quedaron en claro: la política cultural de la actual administración es, cuando menos, deficiente y la cantidad de premios que gana una película no tiene un impacto directo en la taquilla ni en sus ventas posteriores.
Al final las partes se pusieron de acuerdo y la 65 ceremonia de entrega de los Premios Ariel a lo más destacado del cine mexicano, se llevará a cabo el próximo 9 de septiembre en el Teatro Degollado de Guadalajara, gracias a las gestiones del gobierno de Jalisco y contando con el respaldo de la federación a través del IMCINE y de la Cineteca Nacional, que de esta manera hacen eco del aparente ánimo descentralizador de la actual administración.
Películas como Huesera de Michelle Garza, El norte sobre el vacío de Alejandra Márquez, La caída de Lucía Puenzo, La civil de Teodora Mihai y Bardo de Alejandro González Iñárritu son los largometrajes que acaparan las nominaciones. La mayoría de estos trabajos se pueden encontrar sin problema en las principales plataformas, pero para quienes busquen una experiencia distinta se encuentra disponible el ciclo Rumbo al Ariel 2023, en donde algunas de estas producciones pueden verse de manera gratuita en diferentes foros culturales a lo largo y ancho del país.
En la capital michoacana el auditorio del Centro Cultural Clavijero será la sede de esta iniciativa itinerante del 14 al 16 de julio con la presentación de los siguientes títulos:
Viernes 14 de julio
A las 17:00 horas. Ruido, de Natalia Beristáin.
Sábado 15 de julio
A las 17:00 horas, programa de cortometrajes animados y largometraje Finlandia de Horacio Alcalá.
Domingo 16 de julio
A las 17:00 horas, Huesera de Michelle Garza y el documental Dioses de México de Helmut Dosantos.
La entrada a todas las funciones es gratuita y para resolver cualquier duda se recomienda acudir directamente al Palacio Clavijero, ya que hasta el cierre de esta nota no hay información disponible en las redes sociales de este centro cultural.