Para continuar con las celebraciones por los 120 años del cine en Michoacán, se lleva a cabo tanto en Morelia como en Cuitzeo el Festival de Cine Ascaso, que trae consigo una buena selección de cortometrajes provenientes de diversas latitudes.
En Morelia la sede es Casa Cantera y aún podemos ver parte de los cortometrajes el 8 y 9 de junio a las 19:30 horas, una curaduría con realizaciones de España, Dinamarca, Brasil, Irak, Francia y Estados Unidos. El otro anfitrión es Casa Cine Cuitzeo, cuya muestra pasará del 14 al 17 del presente mes con el mismo horario.
En ambos espacios la presentación del ciclo estará a cargo de Anna Soler Cepriá, integrante de la asociación de vecinos de Los Relojes (asociación organizadora de la muestra) y del comité seleccionador de cortometrajes desde el 2015. Para consultar toda la programación, vayan a este link.
¿Qué es Ascaso?
Ascaso es una pequeña aldea de los Pirineos, en Aragón, España. Semiabandonada desde los años sesenta del siglo pasado, ha recuperado cierta vida, fundamentalmente desde del 2012 con el festival de cine, que se autonombra y se reconoce como la muestra de cine más pequeña del mundo. La iniciativa apoyada por la comunidad de vecinos ha recibido muestras de apoyo: de tipo económica, con personal, especialistas, equipo y moral, que parten tanto de lo privado como de lo público, como también de la voz de cineastas que han ganado premios tan importantes como Oscares y Palmas de Oro, ya que han firmado manifiestos para solucionar cuestiones primordiales en la aldea (como la falta de luz eléctrica), y con ello que el festival mantenga el espíritu de independiente, de confabulador con el cine que ellos llaman artesano, de autor y su proyección al aire libre.
La intención colectiva de todos los involucrados en Ascaso es rescatar el mundo rural, abandonado para partir a las urbes, la forma de hacerlo es a través de ver buen cine, nacional e internacional, con compromiso social, que salva pequeños para salvar gigantes. El cine no ha sido una excepción en el rescate de la vida comunitaria, sino también el medio en el que el otro se identifica con su realidad, la comprende y la siente estéticamente, esta son ideas que comparten las sedes en Michoacán con el Festival Ascaso.