La productora Piano ha crecido a la par del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), reconoció Julio Chavezmontes, previo a la presentación de La desaparición de Josef Mengele (Das verschwinden des Josef Mengele, 2025), la nueva película del ruso Kirill Serebrennikov. Esta cinta llega después de presentarse en la sección Cannes Première del festival francés.
La película está basada en la novela homónima del escritor francés Olivier Guez (en español está editada por Tusquets y cuenta además con una versión gráfica de Planeta Cómic). El cineasta ruso decidió adaptar la obra, sin dejar de lado los episodios menos conocidos desde su fuga de Alemania en las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial.
La cinta filmada en su mayor parte en blanco y negro, alterna diversos episodios de la vida de este personaje. Nos cuenta los diferentes momentos que pasó en Argentina, Paraguay y Brasil, además de un breve regreso a la República Federal Alemana en los años cincuenta. Solo ostenta un par de secuencias a color, en los momentos en que se tomaba un descanso de su horrenda labor en Auschwitz para reunirse con su primera esposa, Irene.
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La producción denuncia las redes de apoyo que utilizaban los exiliados nazis en Sudamérica, así como la complicidad de las autoridades locales. También menciona la pasividad de la iglesia católica ante las atrocidades y la indolencia de las autoridades de la naciente República Alemana que acogieron en su seno a varios criminales de guerra.
Es justo hacer un recuento de la historia reciente de Kirill Serebrennikov, quien fue perseguido por el gobierno de Vladimir Putin debido a una supuesta malversación de fondos públicos, aunque la verdadera causa pudo haber sido su actitud crítica hacia el director de la Iglesia Ortodoxa Rusa. Como consecuencia de la acusación, se le detuvo y se le impidió abandonar el país durante un par de años, en 2022, cuando prescribió la prohibición, el cineasta ruso, un crítico acérrimo del sistema político imperante en su país, decidió cambiar su residencia a Alemania.
La desaparición de Josef Mengele nos recuerda la importancia de no olvidar el pasado y de la necesidad que tienen las sociedades de hacer justicia con su historia. Asimismo, nos invita a evitar la impunidad de todos aquellos criminales de alto perfil que siguen eludiendo sus responsabilidades, protegidos por instituciones cómplices o redes de apoyo.