Marc Nollkaemper es el ahora muy famoso cineasta holandés que dirigió el cortometraje escolar The space between us, el cual hubiera pasado casi inadvertido si no fuera porque de pronto alguien le encontró muchas similitudes con La forma del agua, la multipremiada cinta de Guillermo del Toro. En una amplia charla con Adrián González Camargo, el veinteañero deja ver sus influencias y metas, pero sobre todo acepta que sí, que todo ha sido una feliz coincidencia, y nada de plagio.
El mundo tiene distancias cortas y la inmediatez vive en una burbuja que cualquiera puede reventar. Esto es lo que pienso mientras escribo la transcripción de la entrevista que tuve por la mañana hoy, 22 de enero del 2018, un día antes de las nominaciones al Óscar. El tiempo no es suficiente, de modo que la noche se interpone. A la mañana siguiente, antes de las 7, las nominaciones han sido anunciadas. Hace unos días, algunos medios se preocuparon tal vez mucho, tal vez no por tratar de sembrar la duda si el cortometraje holandés The space between us (El espacio entre nosotros) había sido plagiado por Guillermo del Toro para su película La forma del agua, hoy nominada a 13 categorías al Oscar, incluida mejor película.
Para muchos fue absurdo siquiera pensarlo, e incluso el autodenominado “analista de cine” Jorge Ávila tuiteó una serie de argumentos (aunque en realidad son falacias) e insistió en aportar «pruebas» una y otra vez de que la película de Guillermo no era un plagio. Yo personalmente publiqué en Facebook el corto, dejando la interrogante pero personalmente otorgando el beneficio de la duda. Finalmente, ¿cómo podríamos saber si fue o no plagio? Si esto fuera un juicio, habría que tener pruebas. Sin embargo, las partes no pueden aportarlas, de modo que nos quedamos en una especie de «etapa de careo». No pudimos preguntarle a Del Toro y, seamos sinceros, ya a nadie le importa porque la Academia de Cine de Holanda, de donde se gestó este cortometraje, publicó ayer lunes 22 un comunicado donde menciona que los trabajos tienen sus propias identidades y que de ninguna forma pueden estar relacionadas. En este contexto, ese mismo lunes charlamos con el director de The space between us, Marc Nollkaemper, un joven de 26 años originario de Leiden, Holanda.
¿Cuándo terminaste la escuela?
En 2015 hice The space between us. En la Escuela (Netherlands Film Academy) estaba inscrito como guionista, pero en mi último año quería hacer algo distinto. Había estado haciendo películas de arte, porque pensé que ese tipo de filmes me llevarían a ser un cineasta. Si pienso más atrás, siempre quise ser actor pero no funcionó muy bien. Soy rubio y blanco, entonces creo que ya hay muchos actores así en Holanda. Así que pensé que escribir y dirigir podría ser igual de divertido. Al principio creí que sería mi segunda opción, ahora me doy cuenta que es la primera. Tengo muchos amigos en escuelas de teatro y considero que no tendría mucho futuro en la actuación. Desde que tengo 6 años quería ser actor, veo películas todo el tiempo, amo las películas y voy al cine todo el tiempo. Nunca pensé en las partes creativas del arte, nunca pensé que podría hacer eso. Y ahora encuentro que para mí es más fácil que actuar. Soy alguien que piensa mucho y como actor creo que tienes que poder mantenerte en el momento y dejar al personaje sin dudas, y yo soy alguien que tiene muchas preguntas. Tengo 26 años y salí de la escuela a los 24, empecé a los 20 en el 2011.
¿Cuáles son tus héroes en el cine? ¿Tus directores favoritos, los cuales te gustaría «imitar»?
Cambia con el tiempo, supongo. Obviamente Tarantino, soy un fan. Cuando tenía 13 y quería ser actor, un amigo llegó con Pulp Fiction y me preguntó si la había visto y le dije que no. «Eres un estúpido, tienes que ver esta película», me regañó. Y en una noche vimos Pulp Fiction, Perros de reserva, Kill Bill 1 y 2 e incluso Jackie Brown. Fue la entrada a nuevas reglas del cine. Antes de eso me gustaba Spielberg, sobre todo por Jurassic Park, de niño era mi película favorita, igual que Gladiador y El Día de la Independencia. Las películas épicas y heroicas. Cuando conocí a Tarantino descubrí el otro lado del cine; es divertido observar la inspiración de tu inspiración, y para Tarantino el cine es como un todo, y por ese tiempo me incliné más hacia el cine que hacia el teatro. En Holanda el teatro es más abstracto, no hay mucha historia o diálogo, más imágenes y sentimientos, lo cual está bien pero considero que yo amo más las historias y los arcos dramáticos, entonces esto me llevó hacia el cine. Los últimos tres años me ha gustado mucho el cine del oeste, también la ciencia ficción. Derivado de The space between us vimos muchas películas con mi crew, películas que sucedían abajo del agua o en el espacio, con tipos de vidas alienígenas, ya sea en el espacio o en la tierra. Podría decir que desde que empecé con este corto, hacia el final del 2013, buscaba cualquier tipo de filmes de ciencia ficción, más que antes.
¿Recuerdas algún filme en particular, el cual hubieras pensado: quiero que mi cortometraje se vea así?
Sí, The Abyss (El Abismo, James Cameron, 1988) en cuanto a diseño de producción, la forma como manejan el combustible (En Holanda decimos que es algo sagrado). La película (Abismo) es una forma de apuntar el dedo y decir «deberíamos hacerlo mejor como seres humanos», lo cual no me gustó del todo, pero en general el estilo y la historia tuvieron un impacto en mí. Sunshine también (Danny Boyle, 2007), es un filme que habla de cómo el demonio está dentro de nosotros, el hombre que está atrapado en el espacio y mira al sol todo el tiempo, enloqueciendo por el sol. Hay algo de mitológico en esto y de humano también.
¿Cuándo escribiste el guion?
Al final del 2013 empezamos, entre Navidad y Año Nuevo hablé con tres miembros del departamento de efectos visuales en mi escuela, les dije que quería hacer una animación, algo distinto, algo diferente a lo que habíamos estado creando. Estos tres tipos fueron muy entusiastas y me presentaron problemas (“¿debe haber una mejor palabra?”, se pregunta Marc, y continúa), dijeron «si vamos a hacer una animación, tiene que ser buena y será mejor si no podemos ver la boca, de modo que cuando ella hable, esto no sea un problema de animación, lo cual muy pronto me llevó a un mundo en donde nadie podía respirar, y tenían que usar máscaras de gas. Y así fue como empezó. Tuve un conflicto inmediato ya que tenía las máscaras de gas y un problema y reglas en donde no había oxígeno y no se podía respirar. Soy holandés y los holandeses siempre estamos peleando contra el agua. El paso hacia el todo del mundo, que el resto de la humanidad viva en las montañas, fue muy sencillo, porque ya estamos luchando contra el agua. O bueno, ya no lo hacemos hoy día, tenemos los diques pero una vez los diques se rompieron y fue un desastre para todo el país. Yo diría que están en los genes de cualquier holandés, que si los diques rompen estaremos en problemas.
¿Dirías que tu cortometraje es un filme muy holandés?
Pensé que sería eso, por el tema del agua. Pensé que parecería holandés porque nosotros sabemos que el agua podría llevárselo todo. Vivimos tres o cuatro metros bajo el nivel del mar. Recuerdo de niño haber leído una historia donde había una ciudad amurallada y el mar era una amenaza.
Ustedes desarrollaron el proyecto durante el 2014…
Yo escribía y pensé que solo lo iba a hacer con las tres personas iniciales, pero casi al instante ellos empezaron a reclutar al resto. Comenzaron las juntas con el departamento de efectos visuales y aún pensábamos en hacer una animación. Yo tenía mucho conflicto interno porque concebía un cortometraje muy, muy corto. Desde el principio el personaje principal era una científica y no una señora de limpieza. Era la científica quien traía a Adam (el tritón, sirenito para los cuates mexicanos) y después ella al ver la operación, lo dejaría libre. Le cambié el rol de ser científica a una experta en psicología o incluso una especialista en biología. No sabía qué rol darle, aquel que le daría la oportunidad de liberarlo, siendo ella parte del proyecto.
¿Y cómo tuviste la idea de que ella fuera una señora de limpieza?
Es algo de lo que hemos hablado mucho. Dos meses después de que lo platicamos, cuando creíamos que iba a ser una animación, uno de los estudiantes, creo que Guido Ekker (artista de 3D que trabajó en el filme) dijo que debía ser la persona que tira la basura o una intendente. De inmediato me gustó la idea porque era muy diferente a lo que yo había estado trabajando. Dos meses más tarde lo volvimos a hablar y se sintió muy diferente, esta vez fue con Stef Mesman (artista visual 2D) quien me lo dijo. De pronto se volvió esta la verdad, porque daba una sensación en general de estar en un mundo más sucio; al principio era un cuento de hadas, algo más «lindo» (pensando en animación), la gente del crew pensaba en aspectos más limpios, pero ya que el personaje se convirtió en una intendente (en cuanto al rol), el mundo se hizo más oscuro, locaciones que serían imposibles de limpiar. Me encantó la idea de una mujer que intentaría limpiar algo que no se puede, algo que es imposible, todo el mundo está sucio y ella nunca lo va a poder limpiar.
¿Estamos, hacia este momento, en el 2014, hacia mediados?
Sí, creo que mayo.
¿En este momento has trabajado con tus profesores de la escuela? ¿Te han dado consejos o alguna guía?
Sí, te dan conversaciones, durante la escritura de guion, luego cuando editas. Es muy chido, hay buena mezcla entre los profesores. Hay uno de sonido, edición y dirección. En la etapa de guion también hubo uno. No diría que ellos intentan ayudarte o distraerte, a veces parece confuso, pero supongo que eso quieren hacer, tratar de sacar lo mejor de ti, que descubras qué es lo que quieres hacer. A veces pueden ser muy hipócritas y considero que lo hacen para que uno se fortalezca, ser un mejor cineasta.
Sobre el fondeo para hacer la película, sabemos que una parte se financió con Cinecrowd (página del tipo Kickstarter), y juntaron más de 6 mil libras…
La Escuela de Cine es la productora de la película y tiene un gran presupuesto, de modo que los filmes que fungen como tesis siempre tienen dinero. La escuela pide que los alumnos consigamos 5 mil euros por medio de crowfunding para aprender que los recursos no se consiguen fácilmente. Tengo que decir que fuimos muy afortunados en conseguir este presupuesto y la posibilidad de obtener buena iluminación, una buena cámara, buenos actores.
¿Cuánto tiempo estuvo el proyecto en Cinecrowd?
Creo que 30 días, es algo como Kickstarter, tú dices cuánto tiempo. Para Cinecrowd son 30 días. Necesitas una cierta cantidad de gente y compañías que financien tu filme, y hay que darles algo a cambio, un sistema de premios.
Vi unos renders de 3D… ¿Cuánto tiempo les llevó al equipo de VFX y Animación?
Tuve la ventaja de que muchos de los alumnos en mi clase estaban muy inmersos en esto, quienes saben mucho de programación y animación. Eran muy talentosos y su nivel destacaba. Sabían qué era posible y qué no. Yo confié completamente en ellos. No sé cuánto tiempo específicamente se llevaron, empezamos el crowfunding en octubre o noviembre pero probablemente invirtieron mucho tiempo en esos renders. Recuerdo que había un tipo que siempre estaba en su computadora, estaba ahí antes de que yo llegara y después cuando me iba y no había nadie en la escuela y él estaba ahí, trabajando en The space between us.
Cuando salió el cortometraje, ¿lo enviaron a Festivales o cómo fue esto?
La distribución ha sido discreta, pero ahora en YouTube se ha visto tanto, que probablemente es el filme escolar que más se ha compartido. Estoy muy orgulloso, recibo muchos mensajes pero de vez en cuando algunos haters, que sí tienen cierto punto de vista que aprecio, pues nunca se sabe de dónde puede uno aprender. Pero me encanta que le guste a la gente y en lo que se convirtió. Fue muy emocional, de hecho pensé que no había logrado nada con él, todo mi crew lo había hecho pero no estábamos obteniendo mucho reconocimiento, pensé que había fallado como escritor y director.
Sabemos que tu filme fue hecho en 2015… y ahora los reflectores están de vuelta en ti, de alguna manera. ¿Cómo te sientes al respecto, después de casi 3 años de haberlo terminado?
Por haber pensado que fallé como director y escritor, fue difícil y traté de volver a ponerme de pie y empecé a escribir, enviando a festivales, pero no ganaba nada y no obtenía dinero para hacer algo. He estado trabajando en bares, principalmente, así que fueron tiempos duros. Siempre trataba de sentirme positivo al respecto, intentar con más fuerza y tratar de ser mejor. Ahora, de pronto, obtengo el reconocimiento que necesitaba hace tres años y eso es muy lindo. Aún siento que debí mejorar en los dos años siguientes, pero es bueno saber que a la gente le gusta ese tipo de películas. La gente quiere verlas.
¿No te sientes frustrado?
¿Frustrado? No; después de La forma del agua sé que mucha gente del crew estaba en shock, ya había leído un artículo con Guillermo del Toro en 2017 o 2016, no recuerdo bien, donde hablaba de cómo iba a hacer un filme de una intendente y un tritón (forma masculina de la sirena), mi equipo me envió el artículo y me sentí muy orgulloso. Cuando salió el tráiler, la gente me dijo: tienes que ver esto, es muy obvio. Yo nunca creí que había plagio. Cuando observé el tráiler vi las comparaciones desde un buen punto de vista, pude ver que hizo un filme completamente distinto al mío. El núcleo sería: un tritón, una intendente y las instalaciones, pero lo que él hizo en el filme tiene un estilo y un look muy distinto. Incluso la inspiración, sus instalaciones tienen una sensación de concreto diferente a los míos; creo que su filme fue más relacionado con el tiempo, las décadas de 1950 y 1960, los rusos y todo este tema, sí creo que ese mundo es muy distinto al mío. O al nuestro.
¿Se ha acercado a ti alguien de Hollywood?
El viernes (19 de enero) vimos La forma del agua en la Escuela, parte de mi crew estaba ahí, algunos estudiantes. Después de eso tuvimos un skype con Guillermo del Toro por 30 minutos y estuvo muy bien. Le pude preguntar algunas cosas sobre su filme. Él trabajó por mucho tiempo no solo la historia de la intendente y el tritón, pues quería crear algo que tuviera que ver el agua y una bestia que se pareciera a la de La Laguna Negra (Creature from the Black Lagoon, Jack Arnold, 1954). Yo estaba 100 por ciento seguro que este hombre, ni siquiera por accidente, vio mi historia e hizo algo con ella. Leí que Daniel Clowes pensó en algo parecido, así que me interesaría mucho conocerlo, porque ya había estado con esa historia durante mucho tiempo. Para mí todo empezó con el oxígeno, con la polución del aire y las cicatrices. Creo que es cierto, el amor te quita el aliento. Del Toro dice que su película es una historia de amor, la fluidez del amor, y la mía se relaciona con respirar, el acto de respirar y no tanto el agua.
¿Mostró Guillermo del Toro algún interés en ti, como cineasta?
Le escribí una carta, porque yo quería decir algo al respecto pero no sabía qué decir, de modo que durante mucho tiempo estuve callado. No sabía cómo reaccionar o hacia qué reaccionar, así que pensé que era mejor no reaccionar del todo en vez de tener arrepentimientos de las cosas que diría. Él respondió mi carta diciendo cosas buenas, y que cuando viniera a Europa o a Holanda nos tomaríamos un café, lo cual sería increíble. Posteriormente, en el skype que tuvimos en la Escuela, descubrí que es un gran orador, supongo que va a ser una buena conversación.
¿Cuáles son tus sueños? ¿Dónde te ves en 10 años?
Me encantaría ser un cineasta. Escribir guiones es más fácil, pero de lo poco que he dirigido, se me hace muy divertido estar en el set. Debes de saber muy bien por qué lo estás haciendo, de lo contrario te hundirás en cuestiones sobre cualquier aspecto del filme. Si te respondes todas estas preguntas, siempre es divertido. Siento que si no tienes ese control, es muy difícil estar dudando. Soy alguien que duda mucho. En 10 años quisiera ser un escritor. No sé, supongo. Me encantaría hacer otro filme, pero tiene que ser el indicado.
¿Te quedarás en Holanda?
La idea cambia con el tiempo. Escuché que Guillermo del Toro dijo que deberías hacer algo en tu propio país antes de irte. Siento que eso es lo indicado. En Holanda tenemos a Paul Verhoeven, él se fue de Holanda a muy temprana edad, creo que ya había hecho Turkish Delight (Delicias turcas, 1973), fue muy bien recibido en Estados Unidos y pudo hacer las películas que quiso. Los chicos del departamento de efectos visuales están en Canadá, Inglaterra o Los Ángeles y eso suena increíble. Incluso Canadá hace 10 veces más películas que Holanda y especialmente 10 veces más filmes que veo y me gustaría ver que los filmes que veo aquí.
Le he enseñado tu cortometraje a estudiantes y todos piensan que es un plagio, y ahora por lo que tú me dices, estoy convencido de que estamos en un caso de gran coincidencia… ¿qué le dirías a estudiantes que están empezando a hacer sus filmes y que están iniciando en el mundo del cine y se encuentran con esta historia y ven que esto puede suceder?
Para empezar, diría que gracias a La forma del agua mi filme explotó y tuvo reconocimiento, así que la polémica le hizo un gran favor a mi cortometraje.
Marc prefiere que la segunda parte de su respuesta se quede off the record. Así que apago la grabadora y escucho las razones por las que ha preferido acabar con toda esta polémica.