Este viernes el cineasta norteamericano Tim Burton se despidió de México, no sin antes visitar el Pueblo Mágico de Tepoztlán, Morelos, en el que se encuentran resguardadas las primeras películas de Santo, El Enmascarado de Plata, de quien se declaró fan absoluto durante la conferencia de prensa sucedida la mañana del lunes de esta semana en el Museo Franz Mayer de la Ciudad de México.
Durante su infancia en la fronteriza California, Burton veía películas del gladiador mexicano, ya que era de lo poco que le llamaba la atención en la televisión local, pues le parecía inquietante que las doblaran al inglés con una voz muy impostada. Así lo mencionó en la conferencia magistral del día miércoles, realizada en el Auditorio Roberto Cantoral, que paradojas a parte, es un sitio que se encuentra atrás de Cineteca Nacional, recinto que le faltó visitar al cineasta, incluso habiendo estado en Coyoacán días antes, pues ya sabemos que a Burton lo trajo un empresario particular por la exposición El mundo de Tim Burton, que permanecerá en México hasta el mes de abril de 2018.
Al saber que el creador de películas de inadaptados como El joven manos de tijera y Ed Wood era fanático de El Santo, le sugerí a Viviana García Besné, directora del Archivo Fílmico Permanencia Voluntaria, lo invitara mediante una carta a conocer su Baticine, una discreta sala de cine en la que se proyectan y resguardan algunas joyas como Santo contra las mujeres vampiro, un filme que marcó la infancia de Tim.
Fue así que me ofrecí a entregarle esa carta a Tim Burton. Horas después el realizador de películas como Big Fish se encontraba afuera de este rústico y artesanal espacio dedicado al séptimo arte en Tepoztlán, en el que se conservan alrededor de 5 mil latas de cine de ficheras, rumberas, luchadores y ciencia ficción mexicana. Si esa carta no se hubiera entregado a Burton, él no se habría enterado que el Baticine estaba a unos metros de donde coincidentemente descansaba, después de varias actividades realizadas durante la semana en la Ciudad de México.
El próximo lunes, el equipo de producción de CineMasPod, conformado por Paco y Beto Torres, con quienes compartí este sensacional viaje a Tepoztlán, publicaremos una entrevista con Viviana García Besné minutos después de haber conocido a Tim Burton, así como el recorrido que realizaron por las instalaciones del Baticine, que no es “una funeraria”, como Viviana nos lo dijo, sino un archivo fílmico de cine “popular” mexicano. Sí, ése que algunos llaman de “alambritos”, pero que ha sostenido la industria cinematográfica mexicana por décadas.
Tim Burton, cineasta de calibre internacional, prometió regresar a Tepoztlán para defender a El Santo. También para apoyar este valioso proyecto encabezado por Viviana García Besné, quien cuida amorosamente la memoria fílmica de este “héroe nacional” —quien celebra su centenario en este 2017 que está apunto de terminar—, así como de un diverso y extenso catálogo de cine mexicano ignorado y despreciado por las instituciones culturales de este país.
“¡Santo llamando a Tim Burton, Santo llamando a Tim Burton, contéstame, contéstame es urgente Tim!”