En el marco del Día Internacional para la Tolerancia, el mundo amaneció con un polémica campañaque dio la vuelta al mundo: se trata de un «trancazo publicitario» que propinó la compañía italiana Benetton.
«UnHate» logró su objetivo, llamar la atención de los ciudadanos con los besos en las bocas entre líderes mundiales -Papa Benedicto XVI con Ahmed Mohamed; el presidente de EEUU,Barack Obama con su homólogo chino, Hu Jintao, entre otros- en señal de tolerancia a las creencias e ideologías políticas.
El Vaticano pidió el retiro de la polémica imagen, a lo cual la empresa hizo caso inmediato.
En México, los tuiteros exigían que en señal de reconciliación a Benetton sólo le hacía falta un beso entre el ahora candidato de la izquierda a la presidencia Andrés Manuel López Obrador y su vencedor en las elecciones del 2006, el presidente Felipe Calderón para la «República Amorosa»que ayer propuso el político tabasqueño.
Ni tardes ni perezosos los tuiteros se pusieron creativos y aquí los resultados, no sólo «hubo beso» entre AMLO y el Presidente de México, también deleitaron nuestras pupilas con el de Obrador y su otra vez «carnal» Marcelo, el Jefe del Gobierno del Distrito Federal.
Y por último, el del aspirante a la candidatura por el PRI, Enrique Peña Nieto y el ex presidente mexicano, Carlos Salinas de Gortari.
