Close Menu
Revés OnlineRevés Online
  • Artes
    • Convocatorias
    • Danza
    • Fotografía
    • Teatro
  • Ciencia y Tecnologia
  • Cine
    • Convocatorias
    • Críticas
    • Festivales
    • Series
  • Ciudad
  • Columnas
    • Letras, libros y relajo
    • Mi gato comerá sandía
    • Mula de seises
    • ¿Ya amaneció?
    • Preferiría no escribir
  • Letras
    • Convocatorias
    • Creación
    • Entrevistas
  • Música
    • Agenda
    • Contra las Cuerdas
    • Crónicas
    • Discos
    • Entrevistas
  • Hecho en Michoacán

Boletin

Recibe las últimas noticias de Reves sobre arte, cine, letras y mucho más.

What's Hot

The Libertines en México y cuatro latas de whisky

7 junio, 2025

La discapacidad o la sociedad discapacitada

4 junio, 2025

El Festival de Cine de Guadalajara ya es cuarentón

30 mayo, 2025
Facebook X (Twitter) Instagram
domingo, junio 8
Facebook X (Twitter) Instagram YouTube TikTok
Revés OnlineRevés Online
  • Artes
    • Convocatorias
    • Danza
    • Fotografía
    • Teatro
  • Ciencia y Tecnologia
  • Cine
    • Convocatorias
    • Críticas
    • Festivales
    • Series
  • Ciudad
  • Columnas
    • Letras, libros y relajo
    • Mi gato comerá sandía
    • Mula de seises
    • ¿Ya amaneció?
    • Preferiría no escribir
  • Letras
    • Convocatorias
    • Creación
    • Entrevistas
  • Música
    • Agenda
    • Contra las Cuerdas
    • Crónicas
    • Discos
    • Entrevistas
  • Hecho en Michoacán
Revés OnlineRevés Online
Home»Columnas»¡Gratitud, ingratos, gratitud!
Columnas

¡Gratitud, ingratos, gratitud!

Jaime GarbaBy Jaime Garba23 septiembre, 2019No hay comentarios4 Mins Read
Facebook Twitter LinkedIn Telegram Pinterest Tumblr Reddit Email
¡Gratitud, ingratos, gratitud!
Share
Facebook Twitter LinkedIn Pinterest Email

Enciendo el auto y conduzco hacia la entrada del estacionamiento. La gran avenida escupe autos incesantemente y salir de allí requiere pericia y prontitud. De pronto un hueco como caído del cielo. No utilizarlo implicaría esperar quién sabe cuánto tiempo más. Estoy a punto de acelerar cuando diviso a mi derecha una mujer que empuja una carriola con un niño pequeño. Me detengo y además retrocedo unos centímetros para despejarle plenamente el camino a riesgo de pegarle al auto de atrás el cual hace sonar el claxon.

La mujer sabe del caos vial y de la oportunidad que dejo pasar. Incluso así camina lentamente -esperaría como deferencia hacerlo deprisa para alcanzar a colarme en el tránsito. ¡Carajo! “Qué más da” -pienso-. No es su deber leerme el pensamiento ni corresponderme según mis expectativas. Sin embargo hay algo que es imposible perdonarle: ni siquiera me mira, mucho menos de sus labios se lee el movimiento de la palabra “gracias”. “Me vale madres sea una madre…” digo por la ventanilla y la mujer voltea indignada. “¿Cuánto pinche trabajo cuesta decir gracias?” Digo pretendiendo escuche.

Se abre el océano de coches y me introduzco para dejarme llevar por la corriente, al tiempo que veo a través del retrovisor a la mujer ahora sí moviendo la boca maldiciéndome. Mis acompañantes se ríen, yo también lo hago como consuelo. Causa coraje empero cual buen mexicano más vale recurrir al pitorreo para evitar engancharme con algo decepcionantemente cotidiano. ¿Exagero? A las pruebas me remito.

Cuadras adelante, teniendo preferencia, veo a un ciclista agobiado aguardando el momento preciso de cruzar la calle. A sabiendas de eso me tiento el corazón y detengo la marcha obligando al vehículo de mi carril paralelo a seguirme propiciando el paso del hombre. Cuánta poesía en el instante: el asfalto evaporando la humedad de la reciente lluvia, el caos del medio día y los motores rugiendo a la presa mientras ésta pasa lentamente frente a ellos. ¿Adivinan? El cabrón tampoco agradeció.

Existen otras palabras oralmente fáciles que entiendo cuesten trabajo emocionalmente pronunciar; por ejemplo “disculpa” o “perdón”. Disculparse no es mera cuestión de gramática, implica un acto de introspección tan fuerte que despoja de orgullo a quien la enuncia. ¿Pero, gracias? Uno agradece hasta por cosas que no debería. Es una palabra tan sencilla que oralmente requiere mínimo esfuerzo. Prueben: es posible decir “gracias” sin siquiera mover los labios.

La falta de gratitud suele sacarme de mis casillas. Es increíble creer existen personas insensibles incapaces de agradecer por lo más elemental: la comida, el sustento, el amor, los favores del otro. Vaya, incluso bastante gente carente de esto son agradecidos simplemente por la vida. La ingratitud es, hay que decirlo, una carencia del alma, un error del sistema humano tan sencillo de arreglar, mas del cual pocos parecen preocuparse.

Octavio Paz al recibir el Nobel de Literatura en 1990 comenzó su discurso enalteciendo el sentido de gratitud: Comienzo con una palabra que todos los hombres, desde que el hombre es hombre, han proferido: gracias. Es una palabra que tiene equivalente en todas las lenguas. Y en toda es rica la gama de significados… va de lo espiritual a lo físico, de la gracia que concede Dios a los hombres para salvarlos del error y la muerta a la gracia corporal de la muchacha que baila o a la del felino que salta en la maleza. Gracia es perdón, indulto, favor, beneficio, nombre, inspiración, felicidad en el estilo de hablar o de pintar, ademán que revela las buenas maneras y, en fin, acto que expresa bondad del alma.

Las palabras de Paz deberían ser inspiración cotidiana que nos invite a dirigirnos por la vida dejando a diestra y siniestra la palabra -sencilla, breve, precisa- bondadosa capaz de transmutar al otro y a nosotros mismos.

 

@jaimegarba

 

También puede interesarte:

La añoranza por los puestos de periódicos

Share. Facebook Twitter Pinterest LinkedIn Tumblr Email
Jaime Garba
  • Facebook
  • X (Twitter)

Escritor y columnista. Colabora en revistas como Playboy México. Su primera novela es "¿Qué tanto es morir?", editada por Arlequín.

Related Posts

La discapacidad o la sociedad discapacitada

4 junio, 2025

Brainrot: tu cerebro se pudre muy rápido

29 mayo, 2025

El plagio, una forma superlativa del menosprecio: Camilo Ayala Ochoa

26 mayo, 2025

Expediente Vegetal 19: ¿A qué edad podemos escribir como viejos sin molestar a alguien?

4 mayo, 2025

Cuotas de género en la universidad

30 abril, 2025

Expediente Vegetal 18: las carpetas 1, 2 y 3

27 abril, 2025
Destacados
Crónicas

The Libertines en México y cuatro latas de whisky

By Francisco Valenzuela7 junio, 2025

The Libertines dio un magistral concierto en la Ciudad de México, demostrando que la amistad sobrevive a cualquier montón de problemas.

La discapacidad o la sociedad discapacitada

4 junio, 2025

El Festival de Cine de Guadalajara ya es cuarentón

30 mayo, 2025

Brainrot: tu cerebro se pudre muy rápido

29 mayo, 2025
Mantente en Contacto
  • Facebook
  • Twitter
  • Instagram
  • YouTube
  • TikTok
Nuestra Selección

The Libertines en México y cuatro latas de whisky

7 junio, 2025

La discapacidad o la sociedad discapacitada

4 junio, 2025

El Festival de Cine de Guadalajara ya es cuarentón

30 mayo, 2025

Brainrot: tu cerebro se pudre muy rápido

29 mayo, 2025

Suscribete

Recibe las últimas noticias de Reves sobre arte, cine, letras y mucho más.

Demo
Sobre Reves
Sobre Reves

Revés Online es una revista digital de periodismo cultural cuyo objetivo es compartir noticias y opiniones sobre lo que acontece en la cultura y las artes de nuestros días. Fue fundada en 2002 como una publicación impresa mensual, pero en 2011 emigró a la web para alcanzar mayores audiencias y utilizar herramientas multimedia.

Facebook X (Twitter) Instagram YouTube TikTok
Our Picks

The Libertines en México y cuatro latas de whisky

7 junio, 2025

La discapacidad o la sociedad discapacitada

4 junio, 2025

El Festival de Cine de Guadalajara ya es cuarentón

30 mayo, 2025

Nuestro Boletin

Recibe las últimas noticias de Reves sobre arte, cine, letras y mucho más.

Type above and press Enter to search. Press Esc to cancel.